Exportación I (Por D. José Antonio Gutiérrez Camino)
En circunstancias como la actual, en la que la recesión sigue golpeando
duramente con una caída brutal de la demanda interna. Resulta más que necesario
abrirse a otros mercados; ya sean estos emergentes o los tradicionales de toda
la vida.
Es
necesario vender fuera, y me refiero a nuestro productos y/o servicios; no a
nuestros trabajadores cualificados (en su mayoría titulados) que después de
formarse en nuestro sistema de educación con cargo a las arcas públicas, no
tienen mas opción que ir a rendir los frutos que nos pertenecen a otros países.
Hecha
esta obligada mención. Centrándonos en el tema objeto del presente artículo de
opinión, nos adentraremos en el mundo de la exportación.
En
un campo tan especializado como el comercio y dentro de él, el exterior, la
exportación de mercancías generada como consecuencia de la demanda de otros
mercados distintos del propio, traen como consecuencia en muchos casos unos incrementos de la
inversión (productiva que no especulativa) y la creación de puestos de trabajo;
amen de una entradas de divisas, por otro lado muy necesaria para la economía
general. Lo cual no es nunca desdeñable y menos en momentos tan grises como el
que estamos atravesando.
Mientras
escribía este artículo leía los datos publicados por la Secretaría de Estado de
Comercio, relativos a la Encuesta de Coyuntura de la Exportación, relativos al
Indicador Sintético de la Actividad Exportadora. Y veía con alegría la recuperación de niveles positivos en el
primer y segundo trimestre (0,7 para el primero y 1,4 para el segundo).
Pero
como desde que me comprometí con la Agencia Samper en publicar mi artículo hasta
ahora, que por fin lo he terminado, ha pasado mas tiempo del debido, acabo de
leer los datos del tercer trimestre y
vaya, de nuevo el Indicador Sintético de
Actividad Exportadora (en adelante, ISAE) se sitúa en valores negativos durante
el tercer trimestre de 2012.
En
el tercer trimestre de 2012, el valor del ISAE experimenta un descenso con
respecto al segundo trimestre del año. En este trimestre el valor del ISAE se
sitúa en -3,9 puntos mientras que, en el trimestre anterior, fue de +1,4
puntos.
Esta
disminución del ISAE se debe, fundamentalmente, a la opinión más desfavorable
sobre la cartera de pedidos de exportación en este trimestre y, en menor
medida, un cierto deterioro en las previsiones a doce meses.
NOTA:
El ISAE es un indicador que resume la información proporcionada por las
empresas investigadas en la Encuesta de Coyuntura de la Exportación acerca de
la evolución de su cartera de pedidos de exportación en el trimestre de
referencia y las perspectivas sobre la misma a tres y doce meses. Para su
cálculo se aplican las siguientes ponderaciones:
ISAE
= (0,6 x Cartera actual) + (0,4 x Perspectivas) = (0,6 x Cartera actual) +
(0,24 x Perspectivas a tres meses) + (0,16 x Perspectivas a doce meses)
Este indicador puede tomar valores
entre -100 y +100, de manera que valores positivos (negativos) indican una
mejor (peor) percepción de la actividad exportadora y/o de las previsiones
respecto de su evolución futura por parte de las empresas investigadas.
En el tercer trimestre de 2012, el valor del ISAE ha experimentado un
descenso con respecto al segundo trimestre del año, entrando en valores
negativos. El indicador ISAE disminuye 5,3 puntos con respecto al valor
obtenido en el segundo trimestre (+1,4 puntos), situándose en este tercer
trimestre en -3,9 puntos.
El valor negativo del indicador
se debe, únicamente, a la cartera de pedidos, afectada en parte por un
componente estacional negativo. Los otros dos componentes que integran el
indicador, expectativas a 3 meses y expectativas a 12 meses, entran con signo
positivo en el cálculo del mismo.
Aumenta el porcentaje de las
empresas que consideran que los precios de exportación han evolucionado al alza
o se han mantenido estables. Por el contrario, se reduce el porcentaje de
empresas que consideran que ha aumentado el margen de beneficio de exportación
o que se ha mantenido estable.
El factor más citado por las
empresas como influencia positiva en la actividad exportadora ha sido la
evolución de la demanda externa. Sin embargo, tal y como venía ocurriendo en el
trimestre anterior, el precio del petróleo y el precio de las materias primas
continúan siendo los factores con influencia negativa más señalados, por
delante de la competencia en precios y la disponibilidad de la financiación
exterior.
Los factores que, según las
empresas exportadoras consultadas, tienen una influencia positiva en la
actividad exportadora son: la evolución de la demanda externa (para un 35,9% de
las empresas exportadoras consultadas) y, en menor medida, la competencia en
calidad (18,8%), cuya importancia aumenta 2,5 puntos porcentuales
convirtiéndose en el segundo factor más relevante durante este trimestre, y el
tipo de cambio (14,5%), cuya importancia se reduce en 2 puntos porcentuales
respecto al trimestre anterior.
Los factores con influencia
negativa han sido el precio del petróleo con un 71,7%, 9,6 puntos porcentuales
más que en el trimestre anterior que hacen subir a este factor hasta el primer
puesto en este trimestre, el precio de las materias primas, con un 69,3% (+3,7
puntos porcentuales respecto al trimestre anterior), la competencia en precios,
con un 55,4%, (-1,4 puntos porcentuales respecto al trimestre anterior) y la
disponibilidad de financiación, con un 39,3% (-2,3 puntos porcentuales respecto
al trimestre anterior).
FUENTE: MINISTERIO DE ECONOMIA Y COMPETITIVIDAD. SECRETARIA DE ESTADO DECOMERCIO.
Al margen de la cantidad excesiva de datos y cantidades que explican las graficas anteriores, la dura realidad
está ahí y los hechos son los que son. Es necesario aumentar la cartera de los pedidos de exportación.
En un entorno comunitario, en
los que los nuevos “espacios” existentes en el sentido de territorios; llámense
de la Unión Europea, Aduaneros, del IVA, de los II.EE…, son reales; es
necesario delimitar conceptos tales como “expedición”, “exportación”, aduana
tanto de “despacho”, como de “salida”, “regímenes suspensivos” y demás. Su
correcta utilización y empleo, exigen una profunda preparación y puesta al
día por parte de los operadores; ya sean
agentes de aduana, declarantes indirectos, consignatarios, transitarios, en
definitiva de todos los sujetos que además del vendedor y comprador intervienen
de una manera activa en el tráfico comercial propio de las relaciones entre
distintos países. Por esto y al margen de como pueda denominarse el colectivo,
ahora más que nunca es necesaria la presencia en el mercado del comercio
exterior de profesionales que no solo se dediquen a realizar los trámites necesarios para
exportar e importar; sino que asesoren y
canalicen la operativa (compleja por lo general), propia de este tipo de operaciones, de la manera mas
efectiva para los exportadores.
José Antonio
Gutiérrez Camino
Cuerpo
técnico de Hacienda